Nada que esconder, es un documental independiente sobre la vigilancia digital y su aceptación generalizada entre la población debido al argumento de que: “si no tiene nada que ocultar, no tiene nada que temer”.
Mister X, acepta que vigilen su teléfono celular y su computadora portátil durante treinta días. Sus datos son transmitidos a un analista de datos y a un especialista en vigilancia. La película muestra lo que los dos hackers averiguan sobre la vida privada de Mister X, basándose en su actividad digital (WhatsApp, Facebook, datos GPS), sin la necesidad de indagar en el contenido de sus comunicaciones.
Nada que ocultar cuestiona el consentimiento pasivo de la intrusión de las empresas y los Estados en nuestra intimidad y plantea los peligros de la vigilancia masiva para la democracia. Después de que las revelaciones de Snowden causaran un breve revuelo, ahora la mayoría parece aceptar, sin más, un mundo digital vigilado.
Financiado mediante crowdfunding, producido y dirigido por los periodistas berlineses Mihaela Gladovic y Marc Meillassoux, Nada que ocultar es un documental independiente que cuestiona la aceptación pasiva de las incursiones corporativas y gubernamentales en la vida de las personas.
¿Cuáles son las implicaciones para los derechos individuales y la privacidad de los grupos? ¿Nos hemos resignado a vivir en un mundo vigilado?
Nada que esconder, es un documental independiente sobre la vigilancia digital y su aceptación generalizada entre la población debido al argumento de que: “si no tiene nada que ocultar, no tiene nada que temer”.
Mister X, acepta que vigilen su teléfono celular y su computadora portátil durante treinta días. Sus datos son transmitidos a un analista de datos y a un especialista en vigilancia. La película muestra lo que los dos hackers averiguan sobre la vida privada de Mister X, basándose en su actividad digital (WhatsApp, Facebook, datos GPS), sin la necesidad de indagar en el contenido de sus comunicaciones.
Nada que ocultar cuestiona el consentimiento pasivo de la intrusión de las empresas y los Estados en nuestra intimidad y plantea los peligros de la vigilancia masiva para la democracia. Después de que las revelaciones de Snowden causaran un breve revuelo, ahora la mayoría parece aceptar, sin más, un mundo digital vigilado.
Financiado mediante crowdfunding, producido y dirigido por los periodistas berlineses Mihaela Gladovic y Marc Meillassoux, Nada que ocultar es un documental independiente que cuestiona la aceptación pasiva de las incursiones corporativas y gubernamentales en la vida de las personas.
¿Cuáles son las implicaciones para los derechos individuales y la privacidad de los grupos? ¿Nos hemos resignado a vivir en un mundo vigilado?