Friedrich Schiller, el "James Dean de 1782", el primer artista sufrido, apasionado erótico y rompecorazones de todas las chicas. El estreno de su drama “Los bandidos”, se convierte en un acontecimiento tumultuoso que difunde el espíritu del cambio y desquicia a la sociedad feudal.
Schiller es el autor de la “Oda a la Alegría”, que Beethoven inmortalizó poniéndole música, el autor de “Don Carlos” y de innumerables dramas, poemas, ensayos, cuentos y relatos, Schiller es una leyenda literaria.
El escritor alemán, sentó las bases de su obra a una edad temprana con su drama “Los bandidos”, cuando tenía 22 años. Su juventud es una lucha contra su padre, sus superiores, la disciplina, la pobreza, la enfermedad y la autodestrucción. Se rebela, es detenido y encarcelado; huye. Lleno de orgullo y arrogancia, tiene un deseo obsesivo de escribir. En la corte de Mannheim se forma un trío: la bella y joven actriz Katharina, el consagrado poeta de la corte Iffland y el obsesivo y temerario Schiller. Iffland escribe para el presente y Schiller escribe para la posteridad. Ambos se enfrascan en un duro duelo librado con palabras, que al principio ganará Iffland. Schiller obtendrá la verdadera y mayor victoria en Weimar. Pero ésa es otra historia.
“Schiller”, la película, aborda la biografía del poeta con libertad, pero sin desenfreno. Basándose en modelos históricos, el director Weinhart y su guionista Hendrik Hölzemann inventan, por ejemplo, a la actriz Caroline Wiethoeft, interpretada por Barbara Auer, que forma un inteligente vínculo entre las diversas intrigas del teatro de Mannheim. Mediante tales medios dramatúrgicos, la película adquiere un ritmo que Matthias Schweighöfer, encarnando al joven Schiller, apremia y ralentiza repetidamente.
Friedrich Schiller, el "James Dean de 1782", el primer artista sufrido, apasionado erótico y rompecorazones de todas las chicas. El estreno de su drama “Los bandidos”, se convierte en un acontecimiento tumultuoso que difunde el espíritu del cambio y desquicia a la sociedad feudal.
Schiller es el autor de la “Oda a la Alegría”, que Beethoven inmortalizó poniéndole música, el autor de “Don Carlos” y de innumerables dramas, poemas, ensayos, cuentos y relatos, Schiller es una leyenda literaria.
El escritor alemán, sentó las bases de su obra a una edad temprana con su drama “Los bandidos”, cuando tenía 22 años. Su juventud es una lucha contra su padre, sus superiores, la disciplina, la pobreza, la enfermedad y la autodestrucción. Se rebela, es detenido y encarcelado; huye. Lleno de orgullo y arrogancia, tiene un deseo obsesivo de escribir. En la corte de Mannheim se forma un trío: la bella y joven actriz Katharina, el consagrado poeta de la corte Iffland y el obsesivo y temerario Schiller. Iffland escribe para el presente y Schiller escribe para la posteridad. Ambos se enfrascan en un duro duelo librado con palabras, que al principio ganará Iffland. Schiller obtendrá la verdadera y mayor victoria en Weimar. Pero ésa es otra historia.
“Schiller”, la película, aborda la biografía del poeta con libertad, pero sin desenfreno. Basándose en modelos históricos, el director Weinhart y su guionista Hendrik Hölzemann inventan, por ejemplo, a la actriz Caroline Wiethoeft, interpretada por Barbara Auer, que forma un inteligente vínculo entre las diversas intrigas del teatro de Mannheim. Mediante tales medios dramatúrgicos, la película adquiere un ritmo que Matthias Schweighöfer, encarnando al joven Schiller, apremia y ralentiza repetidamente.